Nacemos como semilla, pura potencialidad. Lo que vivimos nos va conformando y puede determinar que florezcamos o que nos marchitemos. Si sientes que te marchitas, está en tu mano cambiar tu destino, sencillamente cambia la tierra, o cambia el agua de riego...
Nada es inalterable y en gran medida somos lo que queremos ser, la imagen que nosotros mismos proyectamos sobre lo que creemos que somos...
CREE EN TI, RECONSTRUYE TU MUNDO
No hay comentarios:
Publicar un comentario