Pasada la resaca de las V Jornadas de Novela Histórica de Granada, recuperado de los meses de trabajo, me he puesto a recopilar recuerdos y una sonrisa ha aflorado...
De nuevo hemos disfrutado, de nuevo hemos aprendido, de nuevo hemos compartido una experiencia tremendamente enriquecedora con autores, lectores, historiadores y amigos.
Las jornadas se consolidan y se convierten en bastión de la novela histórica en España.
Siento que estamos construyendo algo bonito...
Blas Malo, Carolina Molina y yo mismo nos sentimos agradecidos por el apoyo recibido, tanto del público como de las instituciones, los medios y las editoriales, todos unidos por una causa común: la defensa de la literatura y la historia...
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